Sol de papel
Primer bimestre del año, primer viaje cumplido. En este año consignado a los viajes y a la escritura faltaría cumplir con el primer libro. Pero escribir va siempre más lento que viajar, aunque terminará yendo y sucediendo también. De momento proseguimos con las escrituras pospuestas el año pasado. Una reanudación mediante fases de recopilación y archivo de apuntes (muchos de ellos de viajes). Y también, estructurando y realineando por temáticas historias ya escritas, en colecciones de relatos sin matar por el dato. Poco
a poco, eso sí, que no es poco el trabajo de orillar tanto material informe. No es una queja, pues sarna con gusto no pica y también es cansado el viajar; pero, al igual que Kafka, no podría yo pasar ni vivir sin los viajes. Y lo mismo sin escribir, o sin intentarlo. Y luego cuando se publica sale siempre un sol parecido a un milagro. Hoy, una vez enviados a concurso algunos relatos corregidos de urgencia, estoy un poco más cerca de ese nuevo sol proyectado sobre el papel.
Comentarios potenciados por CComment