Alfa y omega
Alfa y omega. Curiosamente, también dentro de la misma semana: lunes la despedida y domingo esta anotación homenaje. Pues tenía que llegar y llegó. Se puede decir que ha sido el momento
más difícil solventado de la mejor manera posible. Con rapidez, eficacia y compañía sentida. Otro consuelo, que hicimos todo cuanto se podía hacer y que estábamos avisados. Y el descanso tan merecido, con esa actitud estoica, encajadora y bonancible que te caracterizaba de siempre, hasta el último día. De aquí a la eternidad.
Por siempre inolvidable, el RC original.
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